Un crecimiento desordenado es lo que viene experimentando desde hace varios años la ciudad de Ayacucho, donde la construcción de las viviendas alcanza las zonas más elevadas de la franja urbana. Por eso, varias zonas de Huamanga estarían consideradas de alto riesgo.
Y es que, según la explicación del vice decano del colegio de Ingenieros de Ayacucho, Pavel Torres Quispe, la invasión de cauces naturales y quebradas como las del cerro La Picota, Mollepata y Yanama, representan una desidia de parte de la propia población y de las autoridades que permiten la construcción de viviendas en dichas zonas.
Torres Quispe refirió también que �este crecimiento desordenado que atraviesa Huamanga está ligado a la politización de la venta de terrenos, una clara muestra de ello, es lo que sucede en el cerro La Picota donde se siguen lotizando las áreas, cuando esta es una zona de gran peligrosidad. Las autoridades nunca toman en cuenta las cuestiones técnicas�.
Asimismo, indicó que el tema de fondo está relacionado a la falta de un plan de crecimiento urbano, que a la fecha no ha sido trabajado por las autoridades de turno. Ante esto, señaló que el gremio de ingenieros en el país viene trabajando en la elaboración de un plan denominado Perú 2040, el mismo que contempla un plan de extensión urbana junto a un plan de desarrollo humano.
Actualmente, en Huamanga y sus distritos, la población asciende a un promedio de 140 mil personas, sin embargo el crecimiento demográfico está previsto hasta las 200 mil personas. Razón por la que urge un trabajo sostenido en base a un plan de crecimiento urbano.