Efectivos antidrogas efectúan un severo control de toda clase de vehículos sospechosos de transportar drogas o insumos químicos.
Para que se tenga una idea del valor de la droga decomisada, el informe del Frente Policial señala que entre enero a setiembre del 2010, el precio de la (PBC) en la zona de producción VRAE, se cotizó en aproximadamente $ 2’048,503 dólares.
La incautación de cocaína está valorizada en Lima en $ 3’594,400 dólares; en los EEUU $ 29’955,000 dólares; en Europa $ 79’880,000 dólares; en Asia $ 185’721,000 dólares; y en Oceanía $ 239’640,000 dólares.
Fuerza policial
En otro cuadro estadístico señala los precios valorizados de la droga en dólares. Por ejemplo, en la zona de producción del VRAE, el kilo de PBC cuesta 800 dólares. En Lima el kilo de PBC cuesta 1,800 dólares, en Estados Unidos 15 mil dólares, en Europa 40 mil dólares, en Asia 93 mil dólares y en Oceanía 120 mil dólares.
En otras importantes tareas policiales, el Frente Policial del VRAE consiguió en el período de mayo del 2009 a noviembre del 2010, la identificación del mando militar de los narcoterroristas del VRAE, hasta entonces conocido como el “camarada Alipio”. Ahora se sabe que responde a la identidad de Orlando Alejandro Borda Casafranca.
Asimismo, ha sido capturado el más grande acopiador de droga en el VRAE, identificado como José Manuel López Quispe (34), alias “Papitas”, detenido en el distrito de Sivia, Huanta.
Este sujeto, aparentemente el representante de varios cárteles de la droga, registra antecedentes entre el 2004 y 2009, incluso está requisitoriado desde el 6 de enero del año en curso por el Primer Juzgado Penal Supraprovincial de Lima, por tráfico ilícito de drogas.
La acción policial, en la gestión del general Perochena, ha experimentado notorio robustecimiento con la creación de 28 comisarías en zonas rurales de las provincias ubicadas en la comprensión del VRAE: Huanta y La Mar (Ayacucho), Tayacaja (Huancavelica); Kimbiri, Pichari y Vilcabamba (La Convención, Cusco), Satipo, distritos de Andamarca y Comas (Concepción, Junín), y Santo Domingo de Acobamba y Pariahuanca (Huancayo).
Para el general Perochena, es fundamental que paralelamente a las acciones policiales y militares, el Estado cumpla con ejecutar los programas de gasto social, para solucionar la situación de extrema pobreza que caracteriza a la población del VRAE, en particular sus altos índices de desnutrición y mortalidad infantil, baja tasa de escolaridad, escasa electrificación, baja rentabilidad de los cultivos, bajo ingreso familiar y alto porcentaje de tierras improductivas que deben ser convertidas en productivas.