Si bien es cierto, la vida militar es caracterizada por una alineación eminentemente castrense, existen otras actividades que contribuyen considerablemente a la formación técnica profesional de los soldados. Y es que, también son capacitados para desarrollar actividades productivas, las cuales las ejercen luego de dejar el uniforme.Este es uno de los tantos beneficios que trae consigo el enrolarse a las filas del Ejército Peruano, pues aparte de servir al Perú con vocación y convicción, los soldados no solo están listos para la guerra sino también están para afrontar el desafío de sobresalir en la vida civil con un mercado laboral altamente competitivo.
CETPRO. Dicen que lo que bien se aprende, nunca se olvida y es así como muchos licenciados del Ejército Peruano han conseguido mejorar su calidad de vida e incluso salir del círculo de la pobreza, poniendo en práctica lo aprendido durante su permanencia en la institución castrense, donde no solo se les enseña a disparar armas u operaciones militares, sino también carreras técnicas productivas.
En total, son ocho carreras técnicas, entre ellas Computación e Informática, Mecánica de Producción, Mecánica Automotriz, Serigrafía, Confección Industrial, Industria del Calzado, entre otros. Estos los ofrece la Segunda Brigada de Infantería en convenio con el Ministerio de Educación.
Según el comandante general de la institución castrense, general Carlos Flores Cabrera, los jóvenes que inician el Servicio Militar Voluntario son capacitados en cualquiera de las carreras con la finalidad de que adquieran conocimientos técnicos.
Una vez culminadas las horas lectivas y la currícula, los soldados son certificados con un diploma a nombre de la nación.
"Los soldados reciben las instrucciones técnicas a la par con sus entrenamientos castrenses, ellos una vez que se gradúen salen del Ejército como técnicos en carreras productivas", indicó el general Flores Cabrera.
REQUISITOS. El jefe del Ejército en Ayacucho invitó a los jóvenes ayacuchanos a enrolarse a dicha institución que puede representar una oportunidad de desarrollo personal. Asimismo, indicó que el Servicio Militar es una actividad de carácter personal y mediante ella, todo peruano puede ejercer su derecho y deber constitucional de participar en la Defensa Nacional y es prestado por varones y mujeres sin discriminación alguna, a partir de los 18 años de edad.
Entre los requisitos también se encuentra tener como mínimo primaria completa,
ser soltero sin hijos, no poseer antecedentes penales, policiales ni judiciales. Finalmente, los seleccionados luego de haber aprobado el examen de aptitud psicosomática podrán ser parte de la tropa del Ejército.
BENEFICIOS. De otro lado, Flores Cabrera indicó que los beneficios de ser parte del Ejército son múltiples, sobre todos para jóvenes de escasos recursos. Entre ellos figura la alimentación diaria, dotación completa de prendas según la región y la estación, así como prestaciones de salud y asignación económica mensual que se incrementa gradualmente hasta alcanzar el diez por ciento (10%) de la Unidad Impositiva Tributaria, y que deberá ser establecida anualmente en el Presupuesto General del Sector Público.
También pueden gozar de viáticos y pasajes para comisión del servicio, seguro de vida y servicio de sepelio. Además, reciben educación básica, educación técnico-productiva o educación superior tecnológica en distintas especialidades, las que darán lugar a la obtención de la certificación o del título correspondiente a nombre de la Nación, reconocido por el Ministerio de Educación, previa convalidación y continuación de estudios de ser el caso, de acuerdo con la Ley General de Educación y sus reglamentos respectivos.
Incluso, les dan facilidades para iniciar, continuar y culminar estudios de educación universitaria en las instituciones educativas públicas, así como para ser considerados con la categoría más baja para los pagos correspondientes en instituciones educativas privadas, entre otros beneficios.
SUELDOS. De acuerdo al último incremento salarial para el personal de tropa regido desde el 21 de setiembre, un soldado recién enrolado percibe 251 nuevos soles. Asimismo, por prestar servicios en la zona de emergencia se le incrementa 225 nuevos soles. Del mismo modo, los soldados reenganchados y de acuerdo al período en el que se encuentren la propina puede llegar a los 1200 nuevos soles, aparte de tener la alimentación asegurada.
"Existen muchas oportunidades en el Ejército, los jóvenes están llamados a servir, aprender y sobre todo a ganarse la vida de la manera más noble, defendiendo al Perú", finalizó el general Carlos Flores, quien invocó a los jóvenes varones y mujeres a inscribirse en el Ejército Peruano.
