60 FAMILIAS SERAN DESPOJADOS DE SUS BIENES.
FAMILIARES DE ABIMAEL GUZMAN GANAN PROCESO JUDICIAL PARA DESALOJO.
Pese a tener título registrado tanto en registros públicos, como documento del Ministerio de Agricultura, cerca de 60 familias serán desalojados de sus chacras, casas, terrenos, según dispuso la Jueza del MBJ-Huanta, luego de un proceso judicial formulada por la familia de Abimael Guzmán a través de la cuñada de jefe de sendero Luminoso.
Teófilo Oré Baños, dirigente de los pobladores como tantos otros moradores fueron notificados el pasado 20 de julio indicándole que el Juzgado Mixto del MBJ-Hta bajo el expediente N° 192-2014- materia exhorto, especialista, Esperanza Huamán Aguado, demandante Pilar La Torre, sucesora Luis La torre Cárdenas, cuyo texto de notificación literalmente señala . Que doy cuenta y atendiendo el pedido de demanda por Pilar la Torre, se ordena la restitución a favor de la recurrente del precio rustico de Iribamaba en 204 hectáreas y 62 metros cuadrados es por ello en cumplimiento a lo dispuesto este Juzgado dispone que el ´día 8 de setiembre llevara a cabo una diligencia de desalojo, refiere los pobladores.
CAMPESINOS EN PIE DE LUCHA
Esteban Quispe, otro morador, contó que los pobladores de ‘Iribamba’ se han organizado para defender las tierras que ocupan. “Que vengan esos señores La Torre. Nosotros vamos a defender nuestras tierras, porque ellos han sido terroristas”, dijo.
Quispe recordó que el 15 de mayo de 1994 desfiló ante las autoridades, en Huanta, con su fusil por haber combatido a Sendero Luminoso. En esa ceremonia, recibió como premio un título de propiedad de tres hectáreas del fundo ‘Iribamba’, que según el Poder Judicial ahora no tiene validez.
“El ministerio de Agricultura nos dio los títulos de propiedad de estas tierras por combatir a Sendero Luminoso. Nosotros vivimos de nuestra chacra, mis hijos están estudiando de lo que produce”, dijo.
“No vamos a permitir que nos desalojen. Defenderemos nuestras tierras”, afirmó Martín Zaire, uno de los 40 agricultores que viven en el ex Fundo Iribamba, en Huanta, sobre el cual pende una resolución del Poder Judicial que ordena la devolución a la familia de Augusta La Torre, fundadora y dirigente del Comité Central de Sendero Luminoso y primera esposa del cabecilla de dicha organización subversiva, Abimael Guzmán.
“Ocupamos estas tierras desde hace más de 30 años, cuando solo había arbustos de cabuya, algarrobos y espinas. Lo convertimos en un terreno para cultivar tara, palto, tuna, maíz, cítricos y otros productos”, expuso mostrando el certificado entregado por el Ministerio de Agricultura.
Ninguno de ellos ha podido olvidar los años de violencia vividos en la zona en los ochenta a raíz del accionar terrorista, cuando el proyecto sangriento de Sendero Luminoso se encontraba en plena efervescencia y la familia de Augusta La Torre abandonó el país y se fue vivir a Suecia.
“Nosotros libramos una lucha frontal contra el terrorismo. Nos organizamos en Comités de Autodefensa, al no soportar los asesinatos que cometían los terroristas, quienes incursionaban constantemente en nuestro pueblo”, dijo Martín, quien junto a su padre trabajó como jornalero en la hacienda que perteneció al patriarca de la familia, Carlos La Torre Córdova, antes de ser expropiada por la Reforma Agraria en 1976.
“Era un tipo soberbio y mandamás como los gamonales de esos tiempos”, recordó Justo Valencia, otro poblador del lugar mostró su indignación. “No es justo que la familia La Torre pretenda despojarnos de nuestras tierras. Nosotros luchamos contra el terrorismo cuando Augusta y Abimael Guzmán imponían el terror que costó miles de vidas”, expresó.
Herencia de Guzmán
Inicialmente los terrenos se dieron en cesión de uso para un centro productor de semillas y en los años 90 se adjudicó gran parte a pobladores del lugar. Sin embargo, en 1995 la familia La Torre pidió la nulidad de la expropiación.
Tras trece años de procesos, en última instancia, la Sala de Derecho Constitucional y Social Permanente declaró fundado el recurso de casación y devolvió el terreno a sus antiguos propietarios.
El secretario general del Ministerio de Agricultura, advirtió que si se ejecuta esta sentencia, el líder de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, podría heredar parte de las tierras, al ser el viudo de Augusta La Torre.
“Consulté con abogados y me dijeron que Abimael Guzmán, en su condición de viudo, podría heredar lo que le corresponde a Augusta La Torre, junto a su madre”, refirió.
Pese a que el El Ministerio de Agricultura interpuso ante el Congreso una denuncia constitucional por el delito de prevaricato contra cuatro jueces de la Corte Suprema que habían emitido un fallo a favor de los familiares de la terrorista Augusta La Torre, camarada “Norah”, a parecer la suerte esta echada en contra de los moradores de la parte baja de Huanta.
La resolución emitida por la Corte Suprema perjudicó a un aproximado de 37 familias (400 personas) reunidas en la Asociación de Campesinos Agropecuarios de Iribamba-Pomancay, quienes viven en las 201 hectáreas del fundo entregado a los familiares de la camarada “Norah”.
FAMILIA DE GUZMAN
Los herederos de Augusta La Torre reclaman más de 300 hectáreas del fundo ‘Iribamba’. El juicio de devolución del fundo fue ganado el 2005 por Pilar Rincón La Torre, en representación del fallecido Luis La Torre Cárdenas y Marina La Torre, tíos de la esposa de Abimael Guzmán.
Alfredo Crespo, el mismo abogado de Abimael Guzmán, dijo que el proceso ya terminó. “Según una sentencia, esa propiedad revierte a la familia de Carlos La Torre Cárdenas y su esposa Delia Carrasco Galdós, quienes dejaron el Perú a comienzos de los 80, cuando Sendero Luminoso inició su lucha armada.
La familia La Torre radica en Suecia y está conformada por 40 miembros que tienen una cuenta familiar en la red social Facebook. Delia Carrasco, la mamá de Augusta La Torre, todavía vive y aparece en una foto con un nieto con el nombre de Abimael.
EL FUNDO ‘IRIBAMBA’
El fundo ‘Iribamba’ se encuentra en el distrito de Luricocha, provincia de Huanta, y hace 42 años perteneció a una de las familias más ricas de Ayacucho, los La Torre. En 1968, el general Luis Velasco Alvarado expropió dicha propiedad al hacendado y exdirigente comunista Carlos La Torre Cárdenas, quien era padre de la esposa de Abimael Guzmán.